A lo largo de nuestra vida los dientes y encías van cambiando y necesitan atenciones distintas. No son iguales los dientes de un niño que los de un anciano. Por eso es importante conocer los puntos en los que debemos centrarnos en función del periodo en el que nos encontremos. 

¿Como cuidar los dientes según la edad?

Niños

Es importante comenzar con el cuidado de los dientes y encías de los más pequeños desde el primer momento, incluso antes de que salgan los primeros dientes. Aunque parezca mentira las primeras caries pueden venir ocasionadas por el biberón.

A la hora de hablar de salud bucodental en bebés y niños hay que tener en cuenta estos factores:

• Cepillarse los dientes después de cada comida: los niños deben cepillarse los dientes 3 veces al día, después de cada comida. El cepillado más importante es el de antes de ir a dormir.
• Dieta variada: deben seguir una dieta equilibrada y variada ya que esto no solo repercutirá en su crecimiento, sino también en su salud bucodental. Es primordial que tomen fruta y verdura ya que fortalece los dientes.
• Evitar el azúcar: es importante reducir el consumo de zumos, refrescos, helados o chucherías ya que el azúcar es el primer enemigo de los dientes.
• Visitar regularmente al odontólogo: los niños deben visitar al dentista como mínimo 2 veces al año, de esta manera el odontólogo podrá controlar la posición de los dientes -de leche y definitivos- y otros aspectos como las caries.

Adolescentes

Los hábitos de higiene bucal a seguir una vez el niño ha llegado a la adolescencia son los mismos que en la etapa anterior, pero si que hay que prestar atención a una serie de factores distintos.

• Ortodoncia: durante este periodo es frecuente que los adolescentes lleven ortodoncia, si es el caso deben tener especial cuidado con la higiene, utilizando cepillos interdentales para eliminar cualquier resto que pueda almacenarse entre los aparatos.
• Piercings: estos accesorios favorecen la aparición de patologías como caries, recesiones gingivales, placa bacteriana o mal aliento, además de aumentar el riesgo de fracturas dentales.
• Usar protectores dentales: si el adolescente practica algún deporte, en especial deportes de contacto es importante que utilice un protector bucal para prevenir lesiones y roturas.
• Visitar al dentista: como ocurre con los niños, durante la adolescencia también es necesario acudir al dentista de manera periódica, cada seis meses, siempre y cuando no aparezca ningún problema.

Adultos

En la edad adulta entran en juego otros factores que afectan a la salud bucodental. Aunque aspectos como el cepillado después de cada comida se deben mantener, hay otros a tener en cuenta:

• No fumar / Dejar fumar: de sobra son conocidos los efectos del tabaco en nuestra salud. El 90% de los cánceres orales están provocados por esta causa, además de otras enfermedades como la periodontitis y periimplantitis. En un segundo plano queda el color amarillento que adquieren los dientes.
• Evitar las bebidas y alimentos ácidos: modera el consumo de alimentos ácidos. Si tomas una bebida ácida, bebe un vaso de agua después para quitar el ácido de la boca.
• Usar hilo dental y enjuague bucal: estos dos pasos deben completar el cepillado. El hilo dental es una de las maneras más efectivas de cuidar los dientes. Permite eliminar la placa bacteriana que se acumula entre los dientes y las encías. El uso de enjuague es recomendable para eliminar bacterias.
• Visitar regularmente al odontólogo: los adultos también deben hacer revisiones periódicas con el odontólogo para asegurarse de que todo está en orden. Como mínimo se debe programar una visita al año al dentista.

Mayores

Durante la tercera edad sigue siendo importante ser riguroso con los cuidados de los dientes y encías. El envejecimiento hace que los dientes sean más frágiles además de que el esmalte y la raíz se vean afectados.

Durante este periodo hay que tener especial atención en aspectos como:

• Prevenir las caries radiculares: las caries radiculares son muy comunes en las personas mayores. Para combatir estas caries, es primordial cepillarse los dientes con flúor, usar hilo dental y utilizar enjuague bucal.
• Combatir la sensibilidad dental: con el paso del tiempo los dientes se van desgastando y eso puede provocar dolor al consumir ciertos alimentos fríos, calientes, ácidos o dulces. Es importante, para evitar esto, que se utilice una pasta dentífrica destinada a dientes sensibles.
• Beber líquidos: es común entre las personas mayores sufrir sequedad bucal. Esto puede desembocar en problemas mayores por lo que es recomendable que se mantengan siempre hidratados.
• Limpiar las prótesis dentales: limpiar las prótesis dentales diariamente es tan importante como mantener una buena rutina de higiene en las etapas anteriores. Para la limpieza de las prótesis existen cepillos especiales.
• Visitar al odontólogo: como en cualquier etapa, es fundamental visitar al dentista de manera periódica o siempre que aparezca una anomalía.

A lo largo de la vida las necesidades de los dientes y encías van variando por lo que es necesario adaptarse a ellas, al igual que a las concretas que pueda tener cada paciente. Ante cualquier duda la mejor solución es acudir al dentista que sabrá guiarnos.